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Felipe Díaz es periodista de La Tercera, trabaja en la sección Nacional y su especialidad son los temas judiciales, pero más de alguna vez le toca escribir sobre algún otro tema de la contingencia del país. Su amor por la música se inició desde los primeros años de su infancia, donde se sentía muy atraído por las melodías y cómo estas lo hacían sentir. En los primeros años de su adolescencia se dio cuenta que la música jugaría un rol fundamental en su vida, en esa época y gracias a la influencia de una tía, se enamoró de The Beatles y comencé a escuchar y leer, de manera casi compulsiva, todo lo que tuviera relación con ellos. ¡Demos el puntapié inicial a nuestra conversación!

Categoría:Melómano

¿Te acuerdas cuándo compraste tu primer disco?, ¿qué edad tenías?, ¿quién te lo regaló?

Felipe Díaz: Mi primera adquisición de música en formato físico fue un cassette. Me lo compró mi papá, cuando yo tenía alrededor de 10 años. Fue el “Master of Puppets” de Metallica. Recuerdo que tras comprarlo lo pusimos en el auto. Mi padre aguantó media canción y lo sacó, porque no le gustó. Tuve que esperar hasta llegar a mi casa para escucharlo por primera vez entero. Ahora, respecto a los vinilos, el primer disco que tuve fue el Tabu de Santana. Me lo regaló mi cuñado y me dijo "todos quienes aman la música, tarde o temprano se cambian al vinilo". Dicho y hecho.

¿Podrías comentarnos en qué consiste tu colección de discos?

Felipe Díaz: Me gusta pensar que en mi colección hay de todo, aunque claramente la balanza está a favor del rock. Tengo algunas discografías enteras, como The Beatles y Pink Floyd, y otras en que estoy muy cerca de tenerlos todos, como es el caso de David Bowie. Pero eso no quita espacio a que hayan también otros álbumes que me gustan y que tienen un valor histórico tremendo, como “Las Últimas Composiciones” de Violeta Parra, o “Pongo en tus manos abiertas”, de Víctor Jara.

¿Cuál es tu grupo favorito?

Felipe Díaz: Que pregunta más difícil, porque en realidad tengo tres músicos/solistas que me fascinan de sobremanera. Sin embargo, si me obligas a elegir a uno, tiene que ser Pink Floyd. Hay algo sobre esa banda... que pasa desde la tragedia inicial de perder a su frontman hasta las luchas internas de poder, que generan una tensión en gran parte de sus discos. Esto se transmite a nosotros de una forma cautivante. Además, junto a ellos podemos pasar por distintos géneros, siendo los más representativos la sicodelia y el rock progresivo.

¿Cuál ha sido el momento más emocionante de tu vida como melómano?

Felipe Díaz: Es complicado poder decantarse por un momento en específico. Sin embargo, haber estado en dos de las mejores disquerías del mundo (Amoeba en L.A. y Generation records en Nueva York) fue una experiencia que destaco. También ha sido emocionante pisar lugares históricos de la música, como el paso de cebra de Abbey Road o haber estado sentado en la misma escalinata en que Bob Dylan se fotografío para la portada del Highway 61 revisited.

¿Cuál es la locura más grande que has hecho para conseguir un disco que deseabas mucho?

Felipe Díaz: Creo que la más habitual es reventar la tarjeta de crédito, cuando el sueldo escasea a fin de mes. Pero también tengo recuerdos de haber estado en el persa Biobío en días de invierno, a las 7.00 AM de un sábado, esperando que abra determinado local porque el dueño dijo que ese día tendría un disco que había buscado por meses. Si llegaba tarde, corría el riesgo que alguien lo comprara antes que yo.

¿Les das un lugar especial a tu colección de discos en tu casa?, ¿tienes rituales especiales a la hora de escuchar un disco?

Felipe Díaz: Está en el living de mi casa, en un lugar central e imposible de obviar. Y bueno, a mí me gusta escuchar mis discos cuando ya todos se fueron a acostar, porque escuchar un álbum no es muy diferente a ver una película. Los discos bien logrados tienen diferentes momentos, como calma y éxtasis, que se aprecian mejor cuando has podido seguir el hilo de toda la grabación.

Aparte de ser un coleccionista de música, ¿qué otras actividades musicales realizas?

Felipe Díaz: Tenía una banda, en que públicamente tocábamos covers y en privado trabajamos algunos temas propios. Estos nunca llegaron a ver la luz. Pero todo eso quedó en el pasado, el trabajo y la vida familiar hicieron imposible continuar con esa actividad.

¿Hay algún disco que has buscado y nunca has podido conseguir?

Felipe Díaz: La primera edición del vinilo de Los Vidrios Quebrados. Las pocas veces que aparece en el mercado, está a un precio prohibitivo.

¿Cuál es el concierto más inolvidable al cual has asistido?

Felipe Díaz: El Desert Trip, que se realizó el año pasado en Indio, California. Nunca imaginé que podría ver en vivo, y en sólo tres días, a los principales artistas que moldearon la música popular como hoy a conocemos.

¿Cuál es el último artista que añadiste a tu colección?

Felipe Díaz: Me parece que es el debut de Daft Punk. Son buenos esos franceses.

¿Cuál es el disco más raro que tienes en tu colección?

Felipe Díaz: Debe ser un disco en vivo de Jaco Pastorius. Fue grabado en Nueva York en los 70. Es un vinilo transparente de edición limitada de 300 copias.

¡Agradecemos a Felipe por conversar con Dragg Magazine y poder conocer sus gustos musicales y rituales como melómano más allá del periodismo! 

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